Cómo motivar a los estudiantes de enseñanza superior
Imagina que has pasado horas preparando un plan de clase. Has diseñado actividades, creado hojas de trabajo y seleccionado material de lectura. Incluso después de todo eso, tus alumnos no están motivados para aprender.
A veces esto es una realidad de la enseñanza. Nos pasa a los mejores. Algunas semanas, todos los días parecen un lunes. Otras, todo el mundo está en plena forma. No siempre se puede predecir qué tipo de grupo va a aparecer.
Afortunadamente, la semana que viene es un nuevo comienzo y vas a arrasar. Nuestra guía casi lo garantiza.
Aquí tienes algunas ideas sobre cómo motivar a los estudiantes de educación superior.
Recompensas y elogios, no amenazas
Los estudiantes entran en un entorno de aprendizaje para superarse a sí mismos, pero algunos de ellos lo pierden de vista por el camino, por diversas razones. Una forma de alienar a un estudiante es amenazarle, en lugar de utilizar el refuerzo positivo. Algunos estudiantes necesitan entrar en ese entorno seguro y de apoyo para encender su cerebro pensante y de aprendizaje; de lo contrario, se sienten hostiles, a la defensiva y reacios a hacer su mejor trabajo.
Los profesores no sólo pueden crear un espacio seguro, sino también mantenerlo psicológicamente. Esto se consigue demostrando que creen en las capacidades del alumno, en lugar de criticarle o imponerle consecuencias si no cumple las expectativas. Es fácil que un alumno se ahorre la energía y no haga el trabajo si cree que va a ser reprendido a pesar de todo.
Si se elogia públicamente a los alumnos que hacen un trabajo ejemplar y se avergüenza públicamente a los que hacen un trabajo deficiente, se crea un ambiente de competición que no es sano para los alumnos. Muchos intentarán hacer lo mínimo para no ser el centro de atención. Lo mejor es alentar y elogiar sus esfuerzos, no el resultado de los mismos. Hazles saber que pueden conseguir cualquier cosa.
Por encima del elogio está la recompensa. ¿A quién no le gustan las recompensas? Son una forma estupenda de motivar a los alumnos y pueden ser tan sencillas como repartir pegatinas, ver una película de vez en cuando o dejar que los alumnos terminen antes. La edad, la capacidad y los tipos de personalidad de tu clase te ayudarán a definir cuál es la recompensa adecuada.
Ahora que la mentalidad de la clase está establecida...
Ofrece experiencias variadas
Algunos alumnos aprenden mejor con un libro. Algunos quieren un profesor delante de la clase explicándolo todo. Otros quieren presentaciones de diapositivas, trabajo en grupo o juegos. Lo que tienes que saber como instructor es que una mezcla de actividades y experiencias mantendrá a los estudiantes atentos y activos. Confiar en un solo método de enseñanza es un fracaso seguro. La variedad ganará su atención, y cuando tienen tu atención, están aprendiendo.
Sin embargo, la mejor forma que tienen los estudiantes modernos de aprender es haciendo...
Aprendizaje experimental
Es el proceso de aprender mediante la experiencia, haciendo las cosas de forma práctica y creando una relación con la actividad que proporciona el conocimiento.
Por desgracia, la mayoría de los estudiantes no adquieren mucha experiencia profesional real relacionada con su carrera hasta después de graduarse. Empresas como Stratx Simulations llevan el mundo de los negocios a las aulas, a través de simulaciones empresariales líderes en el sector. Las simulaciones empresariales pueden fomentar muchas ventajas de aprendizaje, como la reproducción de las condiciones y fuerzas del mercado, y presentan a los estudiantes oportunidades de toma de decisiones que ofrecen un rápido desarrollo personal. De repente, los estudiantes ven cómo sus conocimientos y habilidades pueden tener un impacto directo en las decisiones empresariales.
Responsabilidad y control
Recuerda cómo es ser un joven adulto. Estás librando muchas batallas en todos los frentes y, encima, tienes que pasar la mayor parte del día atento en la escuela. Lo que querías era más autonomía, así como más motivación y energía para librar tus batallas. Así que, tenlo en cuenta y busca formas de dar a tus alumnos más opciones, más control y más responsabilidad en el aula. Dales cierta libertad sobre sus tareas o con quién se agrupan, y puede que descubras que responden con una mayor motivación.
Otra forma de dar más responsabilidad a los alumnos es asignarles tareas en clase, aunque sean pequeñas, como limpiar la pizarra, ordenar las sillas o repartir los papeles. Se sentirán importantes y valorados, y también sentirán que necesitan estar presentes para hacer una contribución valiosa.
La búsqueda de la motivación intrínseca
La motivación intrínseca es la clave del éxito. Todo profesor sabe que los mejores alumnos son los que quieren aprender por sí mismos, no porque estén presionados por alguna razón externa (extrínseca).
Los alumnos que pueden motivarse por sí mismos son estupendos, pero los que tienen dificultades buscan el apoyo del profesor. Puedes dar a estos alumnos el don de la motivación intrínseca llegando a las raíces de sus deseos y necesidades y ayudándoles a descubrirlos por sí mismos. Puede que sólo quieran adquirir conocimientos, que quieran enorgullecer a sus padres o que sueñen con una ciudad a la que mudarse para estudiar.
Si ves que tus alumnos no están intrínsecamente motivados, es tu trabajo empujarles a sacar más provecho de su experiencia de aprendizaje. En el camino, puedes enseñarles sobre el propósito, porque lo creas o no, puede ser un concepto extraño para algunos de ellos. Su esfuerzo y atención puede llevarles realmente lejos.
Consejo: Pregunta a tus alumnos por qué es bueno aprender algo. Si pueden responder, es que han encontrado un propósito. Si no pueden responder, es necesario que intentes incluir un propósito en tus planes de clase.
ADP - Un truco mental épico
Autonomía, Dominio, Propósito (AMP). Este pequeño acrónimo, generalmente visto como AMP, pero a veces MAP, es una forma sencilla de aumentar el deseo de aprender. Es así de simple:
- Autonomía - Da a sus estudiantes más control y responsabilidad para que sientan que su aprendizaje es algo autodirigido.
- Dominio - Anima a tus alumnos a ser la mejor versión de sí mismos y a mejorar constantemente sus habilidades.
- Propósito - muestra a tus alumnos cómo el aprendizaje puede cambiarles la vida y ayudarles a sentirse realizados.
Si un estudiante puede autodirigirse para mejorar y encontrar su propósito, llegará lejos en la vida.
Feedback y progreso
Todos los alumnos se desaniman a veces. Es en esos momentos cuando puedes echarles una mano, ser una fuerza positiva que les guíe, mostrarles dónde pueden mejorar respecto a errores pasados para llegar a ser mucho mejores. Proporciónales comentarios constructivos y sé lo bastante amable como para no dañar su ego ni ponerlos a la defensiva.
Intenta encontrar formas de hacer un seguimiento de sus progresos, no sólo en términos de puntuación en redacciones y exámenes, sino también personalmente. ¿Ves que se esfuerzan más, que trabajan mejor en equipo o que dedican más tiempo a mejorar sus puntos débiles? Si puedes ver signos más abstractos de progreso, esta información puede ser fundamental para que el alumno siga aprendiendo.
Algunas palabras finales
Hemos proporcionado un marco sólido para motivar a los estudiantes de educación superior, pero falta un ingrediente, y es tu singularidad y la de tus estudiantes. Las relaciones individuales que mantienes te proporcionan más información de la que nosotros podríamos ofrecerte, y es esa información la que debes aprovechar para ayudar a aquellos a los que enseñas. Con eso, el potencial es ilimitado.
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