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Actividades de trabajo en equipo para estudiantes

 

Cuando un estudiante entra en un aula o en un entorno educativo, ha hecho una elección y se ha comprometido a aprender. Sin embargo, lo que no ha aceptado es que se verá obligado a limitarse a escuchar y tomar notas. No, han elegido entrar en un entorno de aprendizaje que crea debate, estimula el pensamiento y despierta sus pasiones. Puede que algunos conocimientos se impartan mejor mediante clases magistrales, pero para el alumno moderno, las actividades en equipo son una forma mucho más interesante de adquirir y retener nuevos conocimientos e información.

En este artículo, compartiremos cinco actividades atractivas de trabajo en equipo para estudiantes de empresariales y marketing, algunas de las cuales son clásicos con los que ya estarás familiarizado, así como otras que pueden cambiar tu forma de dirigir el aula.

Primera actividad: Código de conducta

Tanto si estás en una conferencia, un taller, un fin de semana de trabajo en equipo o es la primera semana del curso académico, es una buena práctica reunirse y llegar a un consenso compartido sobre cuáles son los valores y las normas del grupo. Ayudará a generar confianza.

Cómo jugar

  1. Escribe las palabras "agradable, significativo y valioso" en una pizarra o pantalla.
  2. Pide a cada persona que responda qué hará que el evento sea agradable, significativo y valioso.
    • Si hay demasiadas personas, pide voluntarios.
    • Dependiendo de la organización del acto, también puede funcionar pedir a los asistentes que escriban sus ideas en notas adhesivas o que envíen sus respuestas a un chat compartido.
  3. Coloca las respuestas en un mapa mental o en una lista (algunas respuestas serán iguales o muy parecidas, así que intenta que sean ideas generales y no palabra por palabra).
  4. Asegúrate de que la gente entiende la idea que se está compartiendo y está de acuerdo con ella a medida que avanzas.
  5. Una vez que tengas una lista sólida de ideas, revísalas y pregunta a los participantes cómo aplicarían y llevarían a cabo el valor durante el evento. Toma nota de ellas.
  6. Una vez completados los qués y los cómos, dispondrás de un código de conducta que todos deberán mantener y respetar.

Aunque puede que esta actividad no sea la más divertida del mundo, hace que todos participen, desafía las nociones de la gente sobre lo que es importante y valioso y nos enseña mucho sobre las personas que nos rodean. Poner en práctica estos valores también dará a todos un sentido de comunidad y recompensa, permitiendo que el evento se desarrolle de forma más eficiente y con una mayor participación en actividades posteriores.

Segunda actividad: Dos verdades, una mentira

En este clásico juego para romper el hielo, se pide a los participantes que digan dos verdades y una mentira sobre sí mismos. Deben contar sus 3 datos mientras que los demás miembros del grupo deben adivinar cuál es verdad y cuál ficción. La persona que adivine correctamente será la siguiente y la persona que cuente los hechos irá rotando hasta que todos hayan jugado.

En el mundo empresarial real, no siempre nos enfrentamos a información veraz y precisa. Dar a los alumnos la oportunidad de descifrar la verdad de la ficción es más valioso de lo que podríamos pensar a primera vista, y desarrollar ese instinto de veracidad puede ser una ventaja impresionante, especialmente en los juegos de simulación empresarial.

Tercera actividad: Alineación

Otro clásico de los talleres, esta vez tendrás que poner a los participantes en fila por diferentes calificativos, como la edad, la altura, en qué parte del año cae su cumpleaños, la primera letra de su nombre de pila. Ah, también hay una advertencia importante: ¡debe hacerse sin hablar! Si hay muchos participantes, divídelos en grupos: lo ideal es que haya unos 10 por grupo. El trabajo en equipo es esencial para ganar este juego.

Cuarta actividad: La red social offline

Cuando se trata de actividades de creación de equipos para estudiantes de empresariales y marketing, pocas son mejores para ayudar a los miembros del grupo que aún no se conocen a conocerse. El primer paso consiste en conseguir una pizarra grande o un rotafolio que sirva de mapa y, a continuación, dar a cada uno un papelito en el que pueda dibujarse y escribir su nombre y su carrera. A continuación, los alumnos pegan sus perfiles en la pizarra y, con rotuladores de distintos colores, trazan líneas hacia las personas que ya conocen. Puede haber un código de colores, como "rotulador azul si trabajasteis juntos en un proyecto", o "rotulador rojo si los conoces desde hace tiempo".

Ahora que los alumnos saben a quién conocen y por qué, pueden hacer una lista de las personas que no conocen. Un verdadero networker se esforzará por entablar amistad con quienes aún no conoce. El anfitrión de la actividad puede utilizar esa información para formar grupos, organizar ejercicios o planificar futuros proyectos.

Actividad cinco: Dragon's Den o Shark Tank

Habrá algunos estudiantes, especialmente en un curso de negocios, que se han sentido tan inspirados por los programas de televisión "Dragon's Den" o "Shark Tank", que en parte les han inspirado a convertirse en estudiantes de negocios y seguir este camino. Por esta razón, esta actividad será increíblemente popular entre los estudiantes de empresariales, mientras que, al mismo tiempo, el elemento de presentación del programa es en realidad marketing directo, por lo que también atraerá a los estudiantes de marketing. Se trata de uno de los juegos de simulación empresarial más sencillos y gratificantes que existen, ya que no requiere apenas materiales ni software para empezar.

Los participantes se dividen en grupos de 2 a 5 personas. El anfitrión, así como los asistentes o una selección de participantes, harán las veces de los cuatro dragones (con historias de éxito y eslóganes ficticios), quienes, al final de los lanzamientos, decidirán si invierten o no (con dinero ficticio, por supuesto).

Las reglas son sencillas. Cada equipo debe presentar un producto o servicio imaginario a un equipo de inversores (dragones o tiburones). La propuesta debe incluir una marca, un eslogan, un plan de negocio, un plan de marketing y datos financieros como el tamaño del mercado, los márgenes de beneficio y las cifras de ventas previstas.

Cada equipo, por turnos, presenta sus ideas y se enfrenta a un aluvión de preguntas sobre la rentabilidad y legitimidad del concepto. El éxito de su presentación y la calidad de sus respuestas determinarán si los dragones o los tiburones se desprenden de su dinero para invertir. Este juego requiere colaboración, estrategia y asignar eficazmente los papeles dentro de un equipo.

Después de que todos los equipos hayan presentado sus ideas, ganará el que tenga más dinero para invertir.

¿Por qué te animamos a jugar?

Además de ser una oportunidad de oro para agitar el contenido de tu curso, es vital que los estudiantes tengan oportunidades atractivas de entrar en entornos empresariales simulados. Ayuda a desarrollar habilidades como la transacción de información y la confianza para hablar con otros profesionales. Las simulaciones empresariales tienen muchas formas y tamaños, analógicas y digitales, y cada una de ellas presenta un espacio valioso para la mejora personal sin los riesgos y rigores del mundo empresarial real.